El NO, es esencial en la educación de un niño. El NO, marca los limites, establece el orden y configura la capacidad de diferenciar entre lo que se puede y lo que no, lo bueno y lo malo, te hace pensar, reflexionar, valorar, (...), todas ellas habilidades y cualidades que un niño debe adquirir. ¿Te habías parado a pensarlo?
Hoy día existe un alto porcentaje de padres con hijos que tienen serios problemas de comportamiento. En la mayoría de los casos el problema ha venido por la falta de limites, por la falta del NO.
Cuántos recordáis, los que tenéis mi edad aproximadamente os sonará, que cuando tu madre o padre te decía NO a algo, ese NO, no era negociable, no se insistía en por qué no???, No nos parábamos a cuestionarlo y a sobrepasar ese límite que nos ponían con ese monosílabo. Normalmente iba acompañado de una mirada apabullante que te reafirmaba sin abrir boca ese NO rotundo, que te quitaba de la mente la idea que habías preguntado pasando a hacer otra cosa.
Yo lo he hablado muchas veces con amigos, padres, profesionales e incluso con familias con las que he trabajado la Re-educación familiar. Todos coinciden en la misma frase: "ya ves, te decían NO y era No y punto".
Desde Signo Formación, en la medida de lo posible, hacemos nuestros pequeños trabajos de campo, investigamos, hacemos sondeos entre distintos tipos de grupos sociales, hablamos con otros profesionales, y no menos hemos hecho para este peliagudo tema.
Tras haber leído, buscado información, haber puesto en práctica los beneficios del NO en múltiples niños,...,nos parecía que no era del todo suficiente y entonces se nos encendió la bombilla.
Y fue cuando nos acordamos del libro "EL NO TAMBIÉN AYUDA A CRECER" cuya autora es la Psicóloga clínica, educativa y de empresa, Mª Jesús Álava Reyes. Ni un momento dudamos de ponernos en contacto con ella y muy amablemente nos atendió. Desde aquí, aprovecho Mª Jesús, para darle las gracias otra vez. Ella nos corroboró la información que ya sabíamos con datos y estadísticas que voy a aprovechar para mostrárosla.
Ella nos comentaba que por su consulta pasan unos 500 niños y que en la mayoría de los casos los primeros en ser tratados son los padres sin tener que llegar a los propios niños en un alto porcentaje de casos. Siempre que sigan unas pautas concisas y claras.
Y es que sé, padres y madres 2.0, que os puede molestar esta afirmación pero intentemos ser adultos y rasquemos en lo más profundo de nuestro ser poniendo sobre la mesa los errores que hemos cometido, muchos de ellos a sabiendas de que lo eran por distintos motivos, los mas comunes, sentimiento de culpabilidad por no estar el suficiente tiempo con sus hijos, por no querer entrar en una discusión, muchas veces incluso con su pareja, porque hay gente delante y qué van a pensar, porque estamos cansados y con tal de que nos dejen una rato tranquilos se les consiente lo que quieran. Pues sí, son múltiples las causas pero todas residen en la falta del NO y eso hace que cuando ese niñ@ va tomando conciencia del poder que tiene, haga lo que quiera y se tome la licencia de adquirir un comportamiento, digamos impropio.
He de deciros que siempre que os deis cuenta a tiempo, se puede solucionar. Pero claro, el cambio conlleva sacrificio, discusión, malos ratos, llantos, constancia y paciencia. A la primera de cambio el niño no va a aceptar las nuevas normas pero para eso eres tú el adulto que debes ser más fuerte que ellos mentalmente para ganar la batalla y conseguir la modificación de la conducta del crío.
A continuación, os presentamos un cuadro con los porcentajes según distintos ítems que se presentó en un curso que dio la Psicóloga Mª Jesús Álava Reyes en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo. Os trasladamos la información que ella misma nos dio.
Los
resultados que se van a presentar a continuación corresponden a los datos
recogidos por 7 terapeutas cognitivo-conductuales acerca de las consultas que
atendieron en el Centro de Psicología Álava Reyes en los últimos meses referidas
a niños/as y adolescentes de edades comprendidas entre 0 y 21 años.
El
número total de casos revisados para este estudio fue de 331, de
los cuales, el 63% (209) correspondieron a niños/adolescentes
varones y el 37% (122) a niñas/adolescentes
mujeres.
Por
lo que a la edad se refiere, en el 20% de los casos (65) el
niño-adolescente tenía menos de 12 años en el momento de acudir a
consulta, el 43% (143) presentaba una edad comprendida entre 13 y 16
años, y el 37% (123) tenía entre 17 y 21 años.
Y ante esto nos preguntamos, ¿por qué hemos desechado competencias educativas que funcionaban bien y ahora no llevamos a la práctica?, ¿estamos preparados para educar a nuestros hijos?, ¿tan duro fue el tipo de educación fuera y dentro de nuestras casas que hemos elegido el camino más fácil y sencillo sin valorar las consecuencias?, ¿qué fueron de los límites?, ¿qué ocurre con la figura de la autoridad que representaban nuestros padres?
Son tantas las preguntas que nos fraguamos cada día, que claro, podríamos estar interminablemente horas aquí planteándolas, pero todas nos llevan a la falta de control, la falta del limite, la falta de autoridad por parte de los padres. En definitiva, la falta del NO.
Es muy importante para paliar estas circunstancias que a tantos padres se les presenta, conocer el modelo educativo que tienen. Si es autoritario, permisivo o equilibrado. El tipo de estilo incidirá en el desarrollo de las competencias emocionales del niño. Por lo que os podéis hacer una idea de lo importante que es plantear un modelo adecuado.
Un modelo equilibrado hace que el niño tenga un alto nivel en el desarrollo de las competencias emocionales.
Son tantas las preguntas que nos fraguamos cada día, que claro, podríamos estar interminablemente horas aquí planteándolas, pero todas nos llevan a la falta de control, la falta del limite, la falta de autoridad por parte de los padres. En definitiva, la falta del NO.
Es muy importante para paliar estas circunstancias que a tantos padres se les presenta, conocer el modelo educativo que tienen. Si es autoritario, permisivo o equilibrado. El tipo de estilo incidirá en el desarrollo de las competencias emocionales del niño. Por lo que os podéis hacer una idea de lo importante que es plantear un modelo adecuado.
Un modelo equilibrado hace que el niño tenga un alto nivel en el desarrollo de las competencias emocionales.
Y a lo mejor os planteáis que qué es eso de las competencias emocionales, pues bien es la capacidad que tiene una persona para expresar sus propias emociones, con total libertad, y se deriva de la inteligencia emocional que es la capacidad para identificar las emociones; la competencia se aprende y determina la habilidad que tienen una persona para interactuar de forma constructiva con otras personas. Por lo que va a influir y estar presente a lo largo de la vida de nuestros hijos y tenemos que hacerlo lo mejor posible.
No es fácil educar a un hijo, es lícito, normal y propio del ser humano que queriendo hacer lo mejor por nuestros hijos, acabemos metiendo la pata, y no pasa nada siempre y cuando nos demos cuenta a tiempo, nos pongamos en manos de profesionales y le demos la solución pertinente.
Para mí personalmente, ser padres me parece lo más complicado del mundo y admiro mucho a cada uno de los que lo sois, pero también creo que estamos en una era educativa muy poco favorable para el futuro de nuestro hijos y que no avanzamos, ni mejoramos dándoles todo por el mero hecho de ser nuestro hijo.
Si, si , el tesoro más preciado que tenemos, cierto es, pero por ello a veces, debemos guardar nuestro dolor, (el que nos produce no darles algo o el castigarlo o el negarle alguna cosa), para que ese tesoro brille cada vez más, porque la manga ancha solo valdrá para que nuestro tesoro más preciado se vuelva opaco y no consiga brillar en la vida que le espera.
Una persona muy sabía me dijo un día; "para que llore yo el día de mañana, llora tú ahora".
Hoy día lo entiendo e intento transmitirlo a todos los que quieren escucharlo y poner solución a su problema. Gracias por esas sabias palabras!!
Os queremos recomendar otro libro con pautas muy sencillas pero exitosas como es "QUEREMOS HIJOS FELICES" de Silvia Álava Sordo, Psicóloga, Experta en Logopedia, Directora del Área Infantil del Centro de Psicología Álava Reyes.
Y hasta aquí nuestra pequeña aportación sobre la importancia del No.
Esperamos que os haya gustado, que os sea de utilidad si os hace falta y que disfrutéis con las lecturas recomendadas.
Recuerden, el NO si EDUCA.
